" TRABAJAMOS CON ARTESANOS Y TALLERES LOCALES, APORTANDO IDENTIDAD Y UN ESTILO DIFERENCIADO, PERSONAL, MÁS REFLEXIVO, DURADERO Y SOSTENIBLE. HAY UNA BELLEZA PARTICULAR EN RESCATAR LAS TÉCNICAS OLVIDADAS Y LOS MATERIALES EN DESUSO. "
M anex Bilbao es un diseñador vasco establecido en Valencia que desde muy joven mostró una pasión inagotable por el arte y el diseño. "Siempre me ha fascinado montar y desmontar cualquier cacharro que encontraba en casa", cuenta con una sonrisa, recordando su infancia. Esa curiosidad temprana se materializó en su amor por las piezas de Lego y Mecano, las cuales, según dice, fueron las primeras que despertaron su interés por la creación.
Su carrera en diseño comenzó en 2013, cuando inició sus estudios en el País Vasco, en cuyo marco cultural siente que están sus raíces. Sin embargo, su camino lo llevó a Milán en 2016, una ciudad que le ofreció la oportunidad de sumergirse en el diseño de mobiliario, algo que lo apasionaba profundamente. "Milán es la cuna del diseño, y estar allí me permitió aprender de los mejores", comenta Manex. Tras una etapa trabajando en diversos estudios y empresas, decidió establecerse en Valencia, ciudad que hoy en día es su hogar. "En 2022 comencé a dirigir mi propio estudio, centrándome principalmente en el diseño de iluminación, mobiliario y producto", explica con orgullo.
Único y atemporal
Una de las preguntas más recurrentes que recibe Manex es sobre lo que hace que su trabajo sea distintivo. Para él, la inspiración está siempre presente en la naturaleza. "Los paseos con mi perro Rollo son fuente inagotable de ideas", confiesa. Ya sea entre naranjos, en la playa o en la montaña, Manex observa formas y patrones naturales que luego traslada a sus diseños.
Sus creaciones se caracterizan por líneas limpias, formas sencillas y elegantes, pero con un toque único. "Nuestros diseños podrían acercarse al minimalismo, pero siempre tienen ese carácter ‘macarra’ que los hace diferentes", explica. Para él, lo esencial es darle una vuelta de rosca a la solución más sencilla, creando un sello distintivo que sus clientes ya reconocen.
Otra de sus claves es trabajar con artesanos y talleres locales. Manex valora la identidad y la sostenibilidad en su trabajo. "Rescatar técnicas olvidadas y materiales en desuso es parte de nuestra esencia. Echamos la mirada hacia atrás para poder dibujar lo que viene adelante", añade. Para él, el diseño es una manera de compartir cultura, y lo hace a través de los materiales, formas y métodos de fabricación.
Un proceso creativo reflexivo
El enfoque de trabajo de Manex es meticuloso y detallado. "Aplicamos el design thinking y el slow design en cada proyecto, porque creemos en la importancia de comprender el porqué de cada diseño", explica. Antes de comenzar cualquier proyecto, se dedica a analizar las necesidades de la empresa y de sus usuarios, buscando siempre la mejor solución estética y funcional.
El proceso creativo comienza con bocetos y maquetas, empleando materiales como papel, cartón o impresión 3D. Luego, pasa a la fase de desarrollo, donde se crean modelos 3D y renders del producto. Finalmente, se construye un prototipo para verificar su funcionalidad y diseño. "Nos gusta estar involucrados incluso en la fase final, como la dirección artística de la sesión fotográfica o el lanzamiento del producto", añade Manex.
Retos y futuro
Como en todo camino profesional, Manex se ha enfrentado a diversos retos. "Cada proyecto es un desafío, no solo por las necesidades del cliente, sino también por las características de los materiales", señala. Uno de los mayores retos es fusionar la parte funcional con la estética, creando productos que sean innovadores y, al mismo tiempo, fieles a la identidad del cliente.
En cuanto a su visión de futuro, Manex tiene claras sus metas. "Queremos seguir creciendo como diseñadores, descubrir nuevos materiales y ampliar nuestra red de fabricantes y artesanos", comenta. Su objetivo a largo plazo es claro: poner en valor el diseño en cada proyecto que realicen, y convertirse en un referente que logre fusionar la funcionalidad con la estética en cada pieza. “En ello estamos”, sonríe.
Texto: José María Sainz-Maza Del Olmo
Fotografías: Bacon Studio / Tierra de Arcillas / Crea-re / Sarsey / Ángel Segura / One Lighting
" TRABAJAMOS CON ARTESANOS Y TALLERES LOCALES, APORTANDO IDENTIDAD Y UN ESTILO DIFERENCIADO, PERSONAL, MÁS REFLEXIVO, DURADERO Y SOSTENIBLE. HAY UNA BELLEZA PARTICULAR EN RESCATAR LAS TÉCNICAS OLVIDADAS Y LOS MATERIALES EN DESUSO. "
M anex Bilbao es un diseñador vasco establecido en Valencia que desde muy joven mostró una pasión inagotable por el arte y el diseño. "Siempre me ha fascinado montar y desmontar cualquier cacharro que encontraba en casa", cuenta con una sonrisa, recordando su infancia. Esa curiosidad temprana se materializó en su amor por las piezas de Lego y Mecano, las cuales, según dice, fueron las primeras que despertaron su interés por la creación.
Su carrera en diseño comenzó en 2013, cuando inició sus estudios en el País Vasco, en cuyo marco cultural siente que están sus raíces. Sin embargo, su camino lo llevó a Milán en 2016, una ciudad que le ofreció la oportunidad de sumergirse en el diseño de mobiliario, algo que lo apasionaba profundamente. "Milán es la cuna del diseño, y estar allí me permitió aprender de los mejores", comenta Manex. Tras una etapa trabajando en diversos estudios y empresas, decidió establecerse en Valencia, ciudad que hoy en día es su hogar. "En 2022 comencé a dirigir mi propio estudio, centrándome principalmente en el diseño de iluminación, mobiliario y producto", explica con orgullo.
Único y atemporal
Una de las preguntas más recurrentes que recibe Manex es sobre lo que hace que su trabajo sea distintivo. Para él, la inspiración está siempre presente en la naturaleza. "Los paseos con mi perro Rollo son fuente inagotable de ideas", confiesa. Ya sea entre naranjos, en la playa o en la montaña, Manex observa formas y patrones naturales que luego traslada a sus diseños.
Sus creaciones se caracterizan por líneas limpias, formas sencillas y elegantes, pero con un toque único. "Nuestros diseños podrían acercarse al minimalismo, pero siempre tienen ese carácter ‘macarra’ que los hace diferentes", explica. Para él, lo esencial es darle una vuelta de rosca a la solución más sencilla, creando un sello distintivo que sus clientes ya reconocen.
Otra de sus claves es trabajar con artesanos y talleres locales. Manex valora la identidad y la sostenibilidad en su trabajo. "Rescatar técnicas olvidadas y materiales en desuso es parte de nuestra esencia. Echamos la mirada hacia atrás para poder dibujar lo que viene adelante", añade. Para él, el diseño es una manera de compartir cultura, y lo hace a través de los materiales, formas y métodos de fabricación.
Un proceso creativo reflexivo
El enfoque de trabajo de Manex es meticuloso y detallado. "Aplicamos el design thinking y el slow design en cada proyecto, porque creemos en la importancia de comprender el porqué de cada diseño", explica. Antes de comenzar cualquier proyecto, se dedica a analizar las necesidades de la empresa y de sus usuarios, buscando siempre la mejor solución estética y funcional.
El proceso creativo comienza con bocetos y maquetas, empleando materiales como papel, cartón o impresión 3D. Luego, pasa a la fase de desarrollo, donde se crean modelos 3D y renders del producto. Finalmente, se construye un prototipo para verificar su funcionalidad y diseño. "Nos gusta estar involucrados incluso en la fase final, como la dirección artística de la sesión fotográfica o el lanzamiento del producto", añade Manex.
Retos y futuro
Como en todo camino profesional, Manex se ha enfrentado a diversos retos. "Cada proyecto es un desafío, no solo por las necesidades del cliente, sino también por las características de los materiales", señala. Uno de los mayores retos es fusionar la parte funcional con la estética, creando productos que sean innovadores y, al mismo tiempo, fieles a la identidad del cliente.
En cuanto a su visión de futuro, Manex tiene claras sus metas. "Queremos seguir creciendo como diseñadores, descubrir nuevos materiales y ampliar nuestra red de fabricantes y artesanos", comenta. Su objetivo a largo plazo es claro: poner en valor el diseño en cada proyecto que realicen, y convertirse en un referente que logre fusionar la funcionalidad con la estética en cada pieza. “En ello estamos”, sonríe.
Texto: José María Sainz-Maza Del Olmo
Fotografías: Bacon Studio / Tierra de Arcillas / Crea-re / Sarsey / Ángel Segura / One Lighting