"ME GUSTA PENSAR QUE ESTOY LOGRANDO DESARROLLAR UN ESTILO EN CUANTO A FORMA, PERO PRINCIPALMENTE ATESORO MIS PIEZAS PORQUE REPRESENTAN EXPLORACIONES COTIDIANAS DE LO QUE ESTABA VIVIENDO EN LOS MOMENTOS EN QUE LAS DESARROLLÉ."
E l diseño, en cuanto que proceso eminentemente creativo, siempre ha estado íntimamente ligado al arte. Es por ello que Sebastián Ángeles, cofundador en 2016 de la firma mexicana de mobiliario Dórica, se define como un creativo mientras nos explica la importancia que para él tiene apreciar la naturaleza y el entorno que lo rodea: “Me apasiona la creación, ya sea de objetos, espacios o incluso ideas”, nos cuenta esta joven promesa del diseño mexicano desde su estudio en Ciudad de México.
“Me gusta pensar que llevo mi práctica al día a día, desde tomar una buena fotografía hasta fabricar un nuevo objeto; me gusta ver que hay detrás de las cosas, qué ideas subyacen bajo ellas,” Sebastián sonríe. “Desde mis inicios, siempre he buscado establecer un diálogo entre el usuario y los objetos: para mí, todo debe tener una razón de ser, ya se trate de pura innovación o de algo que nos haga cuestionarnos nuestro entorno, nuestra sociedad, o la forma en la que vivimos. Crear es, en cierto modo, una liberación de esas ideas que rondan en mi cabeza y hacen que me cuestione lo que estoy viviendo.”
Las piezas de Dórica se caracterizan por un depurado equilibrio entre un trasfondo abstracto y líneas contemporáneas, lo que las dota de una marcada elegancia atemporal. Para Sebastián, estos muebles representan exploraciones cotidianas de aquello que estaba experimentando en los momentos en que las diseñó: “Cada pieza representa un sentimiento ligado a algo que me sucedía en una etapa concreta de mi vida. Es así como mi trabajo se vuelve muy personal, ya que mi visión está plasmada en cada mueble,” comparte Sebastián. “Creo que existe una relación muy cercana entre el arte y el diseño cuando este se plantea con algún trasfondo conceptual. Desde mi punto de vista, el diseño tiene más espacios de interpretación que la mera funcionalidad, pues sirve para comunicar ideas, y esas ideas pueden ser plasmadas de la forma en que el creador decida”.
En cuanto a su cosmogonía personal, Sebastián nos descubre que está profundamente interesado en la interconexión que existe entre las personas, el universo y los objetos. Una idea que, nos dice, se ha tratado de definir desde el comienzo de los tiempos a través de diferentes mitos. “Creo que parte del trabajo artístico es intentar interpretar esas relaciones y darles un significado,” explica el diseñador. “La forma siempre está ligada al concepto, por lo que me resulta muy valioso encontrar relatos sobre aquello que quiero decir en las creencias y tradiciones de algunas civilizaciones antiguas. Es fascinante aprender cómo esas personas explicaban los aspectos cotidianos de la vida, como el tiempo, los fenómenos naturales o incluso la muerte; esos simbolismos nutren los conceptos y me ayudan a tener referencias más claras sobre el tema del que quiero hablar.”
Hablando sobre el estado actual del diseño mexicano, Sebastián se muestra optimista: “Me parece que el diseño en México está llamando la atención de la escena internacional”, declara. “Somos un país rico en cultura, tradiciones y materias primas, y no hay mejor combinación que esa en el universo del diseñador, a tal punto que está llevando a artistas y diseñadores extranjeros a buscar la forma de tener una base en nuestro país. Además, es reconfortante saber que aún contamos con excelentes maestros artesanos capaces de desarrollar las ideas que nacen en nuestra cabeza, un factor fundamental y que no se encuentra tan fácilmente en otros países. Mientras sigan existiendo propuestas frescas que sepan reinterpretar nuestra herencia cultural, el diseño mexicano seguirá siendo un referente de calidad.”
Propuestas es algo que no falta en el horizonte de Sebastián, que no duda en compartir con nosotros algunos de sus proyectos antes del término de la conversación. “Estoy trabajando en una nueva colección y espero poder presentarla internacionalmente en 2023. Últimamente he desarrollado muchos productos nuevos, y en ocasiones es difícil lanzarlos al mercado, así que eso va a tomar gran parte de mi tiempo en los próximos meses.”
Fotografías: Emilio Torres
"ME GUSTA PENSAR QUE ESTOY LOGRANDO DESARROLLAR UN ESTILO EN CUANTO A FORMA, PERO PRINCIPALMENTE ATESORO MIS PIEZAS PORQUE REPRESENTAN EXPLORACIONES COTIDIANAS DE LO QUE ESTABA VIVIENDO EN LOS MOMENTOS EN QUE LAS DESARROLLÉ."
E l diseño, en cuanto que proceso eminentemente creativo, siempre ha estado íntimamente ligado al arte. Es por ello que Sebastián Ángeles, cofundador en 2016 de la firma mexicana de mobiliario Dórica, se define como un creativo mientras nos explica la importancia que para él tiene apreciar la naturaleza y el entorno que lo rodea: “Me apasiona la creación, ya sea de objetos, espacios o incluso ideas”, nos cuenta esta joven promesa del diseño mexicano desde su estudio en Ciudad de México.
“Me gusta pensar que llevo mi práctica al día a día, desde tomar una buena fotografía hasta fabricar un nuevo objeto; me gusta ver que hay detrás de las cosas, qué ideas subyacen bajo ellas,” Sebastián sonríe. “Desde mis inicios, siempre he buscado establecer un diálogo entre el usuario y los objetos: para mí, todo debe tener una razón de ser, ya se trate de pura innovación o de algo que nos haga cuestionarnos nuestro entorno, nuestra sociedad, o la forma en la que vivimos. Crear es, en cierto modo, una liberación de esas ideas que rondan en mi cabeza y hacen que me cuestione lo que estoy viviendo.”
Las piezas de Dórica se caracterizan por un depurado equilibrio entre un trasfondo abstracto y líneas contemporáneas, lo que las dota de una marcada elegancia atemporal. Para Sebastián, estos muebles representan exploraciones cotidianas de aquello que estaba experimentando en los momentos en que las diseñó: “Cada pieza representa un sentimiento ligado a algo que me sucedía en una etapa concreta de mi vida. Es así como mi trabajo se vuelve muy personal, ya que mi visión está plasmada en cada mueble,” comparte Sebastián. “Creo que existe una relación muy cercana entre el arte y el diseño cuando este se plantea con algún trasfondo conceptual. Desde mi punto de vista, el diseño tiene más espacios de interpretación que la mera funcionalidad, pues sirve para comunicar ideas, y esas ideas pueden ser plasmadas de la forma en que el creador decida”.
En cuanto a su cosmogonía personal, Sebastián nos descubre que está profundamente interesado en la interconexión que existe entre las personas, el universo y los objetos. Una idea que, nos dice, se ha tratado de definir desde el comienzo de los tiempos a través de diferentes mitos. “Creo que parte del trabajo artístico es intentar interpretar esas relaciones y darles un significado,” explica el diseñador. “La forma siempre está ligada al concepto, por lo que me resulta muy valioso encontrar relatos sobre aquello que quiero decir en las creencias y tradiciones de algunas civilizaciones antiguas. Es fascinante aprender cómo esas personas explicaban los aspectos cotidianos de la vida, como el tiempo, los fenómenos naturales o incluso la muerte; esos simbolismos nutren los conceptos y me ayudan a tener referencias más claras sobre el tema del que quiero hablar.”
Hablando sobre el estado actual del diseño mexicano, Sebastián se muestra optimista: “Me parece que el diseño en México está llamando la atención de la escena internacional”, declara. “Somos un país rico en cultura, tradiciones y materias primas, y no hay mejor combinación que esa en el universo del diseñador, a tal punto que está llevando a artistas y diseñadores extranjeros a buscar la forma de tener una base en nuestro país. Además, es reconfortante saber que aún contamos con excelentes maestros artesanos capaces de desarrollar las ideas que nacen en nuestra cabeza, un factor fundamental y que no se encuentra tan fácilmente en otros países. Mientras sigan existiendo propuestas frescas que sepan reinterpretar nuestra herencia cultural, el diseño mexicano seguirá siendo un referente de calidad.”
Propuestas es algo que no falta en el horizonte de Sebastián, que no duda en compartir con nosotros algunos de sus proyectos antes del término de la conversación. “Estoy trabajando en una nueva colección y espero poder presentarla internacionalmente en 2023. Últimamente he desarrollado muchos productos nuevos, y en ocasiones es difícil lanzarlos al mercado, así que eso va a tomar gran parte de mi tiempo en los próximos meses.”
Fotografías: Emilio Torres